"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Inclusión educativa
Gobierno y asociaciones animan a estudiantes con discapacidad a solicitar las becas Reina Letizia para la Inclusión
17/06/2021
El director general de Derechos de las Personas con Discapacidad del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, Jesús Martín Blanco, y el vicepresidente ejecutivo de Fundación ONCE, Alberto Durán, animaron este jueves a todos los estudiantes con discapacidad a partir de los 16 años a solicitar las ayudas Reina Letizia para la Inclusión, que en esta segunda edición dispondrán de un presupuesto conjunto de 4.750.500 euros, casi cinco veces más que en la primera edición, que contó con un millón de euros.
En la presentación oficial de la nueva convocatoria de ayudas, la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, agradeció la participación de los estudiantes con discapacidad, los profesionales y las asociaciones del sector en la puesta en marcha y desarrollo de este programa del Real Patronato sobre Discapacidad, que busca mejorar la formación de estas personas ofreciendo apoyo para que continúen sus estudios y aumentar así su empleabilidad.
“La discapacidad no debe coartar las expectativas de nadie”, declaró, por lo que estas ayudas buscan contribuir a eliminar “las barreras” que muchos estudiantes con discapacidad se encuentran para proseguir su formación, en especial cuando terminan la educación obligatoria.
Según Martín Blanco, estas ayudas permitirán que “la trayectoria académica (de los estudiantes con discapacidad) no se vea truncada”, y animó a las entidades del sector y a las propias personas con discapacidad a “difundirlas, contarlo entre sus conocidos y a participar” en el programa.
Subrayó el incremento presupuestario respecto a la primera edición, lo que demuestra “el compromiso del Gobierno con este programa” que, a su juicio, será “una herramienta muy eficaz para acabar con la discriminación que se da en tantos ámbitos” respecto a las personas con discapacidad.
También Alberto Durán animó a todos los estudiantes con discapacidad interesados a enviar sus solicitudes, cuyo plazo se abre este jueves y concluye el próximo 16 de julio.
INNOVACIÓN SOCIAL
A su juicio, “el Gobierno ha hecho una apuesta económica muy generosa”, que “tendrá gran eficacia para lograr la igualdad de oportunidades y conseguir una universidad más inclusiva hoy, y una sociedad más normalizada mañana”.
Destacó “la enorme responsabilidad” que para Fundación ONCE supone la gestión del programa, aunque aseguró “asumirla con mucho gusto”, dada la ”necesidad y utilidad” de estas ayudas.
Según Durán, “permitirá abrir una vía de esperanza ante muchas situaciones dolorosas que habíamos detectado y que desde el movimiento social de la discapacidad nos habían planteado”.
“Teníamos a empresarios que se quejaban de que no había suficientes trabajadores con discapacidad bien formados; estudiantes y familias que abandonaban sus sueños de formación ante la continua carrera de obstáculos que encontraban una vez terminada la educación obligatoria; un sistema de becas general que no atendía a las necesidades específicas de las personas con discapacidad, y estudiantes que querían participar en los programas de movilidad internacional y nacional para los que eran directamente invisibles”.
Fue así como surgió la idea de estas becas específicas, que Martín Blanco definió “como ejemplo de innovación social nacida desde los propios interesados”. “Es, además, un caso de buenas prácticas para conseguir la igualdad de oportunidades”, subrayó.
REQUISITOS
Para solicitar estas ayudas, es preciso tener más de 16 años, estar inscrito en algún centro de estudios oficial en el presente curso y poseer la nacionalidad española o un permiso de residencia legal en España.
Se concederán por los siguientes motivos: para la adquisición de productos de apoyo y necesidades técnicas (hasta 4.000 euros por persona); para la asistencia técnica y personal de apoyo a la mejora formativa (hasta 6.000 euros); para la realización de estudios de grado, posgrado y master (2.000 euros); para la participación en programas de movilidad internacional (6.000 euros); para la participación en programas de movilidad nacional (4.000 euros); para la adquisición de competencias lingüísticas (1.200 euros); ayudas para el Doctorado (3.000 euros), y para deportistas de alta competición (15.000 euros).
En este último caso, se entiende que “existe una combinación de todas las anteriores”, explicó Mayte Fernández, de la Dirección General de Derechos de las Personas con Discapaciad. Agregó que cada estudiante podrá solicitar hasta 15.000 euros como máximo, “combinando las distintas ayudas que en su caso puedan aplicarse”.
Como criterios de selección, se tendrán en cuenta el grado de discapacidad (40%); el expediente académico (30%), y el nivel de renta familiar (20%). Adicionalmente se considerarán circunstancias como la pertinencia de los estudiantes a grupos de especial vulnerabilidad (mujeres, zonas rurales, inmigrantes…). Tendrán que estar matriculados en los programas específicos de las ayudas que requieren y, cuando termine el curso, deberán justificar todos los gastos.
A LARGO PLAZO
El presidente del CERMI, Luis Cayo Pérez Bueno, se felicitó por el aumento presupuestario del programa y subrayó la importancia que este tendrá “para las cientos de personas, miles en unos años, que habrán podido adquirir los elementos de apoyo que necesitan, recibir asistencia personal o participar en un programa de movilidad nacional o internacional”.
Laura e Isara, estudiantes de doctorado en la Universidad de la Laguna y de grado en la UNED y beneficiarias de estas ayudas en la primera edición, dieron fe de todo ello en sus intervenciones.
Finalmente, Pérez Bueno apuntó la posibilidad de que “en cuatro o en cinco ediciones”, estas ayudas se integren en “el programa general de becas al estudio, que en la actualidad apenas tiene en cuenta los aspectos relacionados con la diversidad”.
En su opinión, convendría que las personas con discapacidad puedan “acudir a los recursos generales y no a recursos extraordinarios”. Por eso, este programa “nos puede servir para detectar dónde hay más necesidades” y proponer así un mejor diseño del modelo general, declaró.
De hecho, la dotación para la línea de ayudas a la asistencia personal ha aumentado hasta los 2,5 millones de euros en esta segunda edición, dada la cantidad de solicitudes recibidas en la primera.
Fuente: Servimedia
